Este es el fin de semana de escribir la carta a los Reyes Magos. Yo ya tengo la mía ¿y vosotros? ¿qué habéis pedido? ¿habéis escrito ya la carta? ¿a qué estáis esperando? ¿es que no os ha obligado ningún niño de vuestra casa aún?
Este es el primer año que escribo una carta que va a leer la peque antes de que la echemos al buzón. Y lo que puedo contarle a ella, os lo puedo contar también a vosotros…
(Aquí el PDF de la carta, por si véis a los Reyes Magos y se la queréis dar en mano).
[slideshare id=15557244&doc=cartaalosreyesmagos-121209084610-phpapp01&type=d]
* PD: Este año me dijo un posible inversor escribe tu carta a los Reyes Magos. Y la escribí, vaya si la escribí. Pero esa es una carta diferente, es la de Júramelo, no la mía. Yo pido bastante menos… Por cierto, hablando de tecnología, mis listas de Amazon están aquí: [.ES], [.COM] y [.CO.UK] (nunca jamás las ha usado nadie, pero ahí están).
El otro día en Madrid me duché, me puse un vestido bonito, y en el sofá de un amigo con una mantita me dispuse a leer The Casual Vacancy, el nuevo libro de J. K. Rowling, que había salido ese día. Las últimas sesenta páginas me las acabé anoche.
Hace años subimos los Pirineos, en plan familia y amigos. Un día incluso pasamos a Francia, que tenía los mismos pinos. Otro día nos perdimos unos pocos y los de la Guardia Civil dijeron a los demás que cuando lleváramos tres días por ahí mandarían a alguien, que estaban buscando aún al desaparecido de la
Ya lo he dicho en twitter (oh, el blogueo se muerde la cola), pero ¡qué gran cinco de noviembre para recordar! Un día histórico. Si no por otra cosa, porque algo, al menos una cosa, una persona, ha cambiado. Y por el ambiente que se respira. Si me pongo poética voy a sonar antisistema: no
Comentarios