En latín
Raptores orbis, postquam cuncta vastantibus defuere terrae, mare scrutantur: si locuples hostis est, avari, si pauper, ambitiosi, quos non Oriens, non Occidens satiaverit: soli omnium opes atque inopiam pari adfectu concupiscunt. Auferre trucidare rapere falsis nominibus imperium, atque ubi solitudinem faciunt, pacem appellant.
En español
«(Los romanos), ladrones del mundo, una vez han devastado la tierra, se dirigen al mar; son avariciosos si el enemigo es rico, arrogantes si es pobre; ni Oriente ni Occidente les sacian; con la misma locura quieren poseer la riqueza y la pobreza de las naciones. Usan el falso nombre de imperio para el robo, el asesinato y el pillaje: y cuando ya sólo queda desolación, lo llaman paz.»
Tácito, Agrícola, 30, 4
De la exposición que hay ahora mismo en el Coliseo de Roma, Trionfi romani. Como casi todo lo que se ha dicho de los romanos, se aplica también a otros imperios. No quiero señalar.
Sí. ¡Lo he hecho! Me he apuntado al curso de cómic que van a dar Jorge G y Juan Álvarez en Bellas Artes, en Murcia. Estoy más feliz… hmmm… ¿que cuando compramos los billetes a Japón? ¿que cuando le dieron el premio a Pablo? No sé, vamos, radiante como el que radia o irradia cosas.
Soy una fan de estrenar, y nunca he entendido a los que intentan aferrarse al estado de nuevo de las cosas. Lo mejor de las cosas es usarlas. Jamás entendí a las niñas que guardaban las muñecas en las cajas, con todos sus complementos, tal y como estaban cuando les quitaron el papel de regalo
Decíamos ayer, que nosotras no comprendíamos qué fascinaba tanto a Roberto Sáinz la casa en la que creció, hasta que la vimos. Le habían puesto el nombre del gran héroe nacional: Rubén Darío, el padre del modernismo (este poema, Divagación, gustará a los traductores del público). Para el resto: Lo fatal Dichoso el árbol, que
Comentarios