Hay 10 errores que pueden hacer que no consigas financiación, o peor, que pierdas dinero (que además tienes que devolver).
«He visto cosas… que se me ponen los pelos de los pies de pestañas»
—nos ha dicho Antonio García, @guerreroasesor, en este desayuno de AJE Murcia, cual replicante.
Este fue el tono desenfadado de esta charla. Muchos buscan el príncipe azul de la financiación, pero aunque lo encuentres, te puede salir rana.
El desayuno comenzó con el resumen de Miguel de Haro de las líneas Enisa en las que puede ayudar Aje. En 3 años han contribuido a que se concedan 2,5M€ en créditos Enisa a 59 jóvenes empresarios de Murcia.
Luego Antonio García nos echó estas 10 perlas (+1 de regalo). De nosotros depende sacarles partido.
Hay que comenzar 3 meses antes para operaciones nuevas, 2 meses antes para renovaciones.
No das datos, luego das mala espina.
Ni corta ni hinchada: con proformas. Detalla cuánto pones y cuánto pides.
Corto: estrangula tesorería. Largo: coste financiero excesivo.
Si no puedes devolverlo por qué te lo van a dar. No pidas más del 30% de facturación de la empresa.
A esta altura del desayuno me pusieron delante la bandeja de los bollos, y me comí un cruasán de pura ansiedad.
No aportas suficientes. O aportas sin cabeza: avala con un bien concreto, no personalmente con todos tus bienes futuros. Otra idea: hacer un aval mancomunado (sólo por tu % del negocio) y no solidario (todos por todo). Hoy hay que ser imaginativo: además, los bancos no quieren más ladrillos con lo que algunos pueden estar más abiertos a garantías no hipotecarias.
Diseña tú lo que tú necesites, o mejor que te asesore alguien de tu parte: no te dejes vender lo que ellos quieran.
Qué necesitamos, cómo lo haremos, cómo lo devolveremos.
Echas los papeles y te desentiendes: no funciona. Primer seguimiento, a las 72h: un café a las 8:30 con el responsable ¿falta algo, hay dudas? Luego cada semana.
Pide una oferta vinculante unos días antes. Hay que negociar las condiciones antes de ir al notario, para evitar firmar in extremis. No serías el primero que le ponen delante para que firme algo que no tiene nada que ver con lo que le habían dicho. No lo firmes; tienes tiempo para arreglarlo (o bien ver error 1… y siguientes).
—Pues cierra y devuélveme lo que ya me debes.
No dejes que te digan esto. Evita esa situación: prepara la reunión. Di la verdad pero no te enrolles. Responde con sí o no, no «siporque»: el resto en el dossier.
Qué entidades funcionan, hoy, según @guerreroasesor (opinión que puedo compartir o no, y que no es mi recomendación personal):
Sabadell (Atlántico: ¡ojo, los otros no!), Bankinter, Cajamar
Y vosotros ¿qué consejos daríais al que pidiera financiación? Y la pregunta estrella de Antonio: ¿si fuera tu dinero, lo prestarías en estas condiciones?
Hoy empiezo de verdad a publicar las preguntas que me hacen por correo electrónico (que siempre contesto, aunque a veces tarde un poco). La última puede que beneficie a alguna agencia de la competencia, así que lo justo será que beneficie (si sirve) a todas las que hubieran querido hacer la misma pregunta. Primera pregunta
Esta frase es simple, pero me ha costado años aprender a pronunciarla: Necesito ayuda. Dos palabras. Ni siquiera conseguí publicar la entrada del blog con esas palabras. ¿Queréis ejemplos? Os cuento (de lo que se puede publicar): Beta-testers para Júramelo, nuestro nueva plataforma para traducciones juradas Expertos en SEO/SEM/Adwords Traductores matemáticos/físicos nativos de inglés que
Esta mañana hablaba con un grupo de matemáticos en el desayuno (en mi vida esto es algo común) y comentábamos el descenso de la inversión en I+D de las empresas en los últimos tiempos. Yo decía: —Tenéis que entender que una empresa tiene el deber de proteger su existencia. Sólo si sigue existiendo podrá un
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