Cocinando, me quemo con la sopa. Mi hija, para que me sienta mejor, me dice lo más bonito que se le ocurre: «Mami, te quiero como si fueras mi hija». Ya no me duele nada. Algo he hecho bien. Magia.
Si el otro día hablé de lo malo, hoy hablaré de lo bueno de los juguetes. Lo más básico es que el mejor regalo que puedes hacer es tu atención. El juguete favorito de tus niños eres tú. A los niños (y a los mayores) lo que más les gusta es que las personas a