Parece que voy a tener que puntualizar lo que escribí en aquel artículo sobre qué hace una traductora nada más sacar el ordenador de la caja.
¿Que por qué?
Porque os escribo desde mi flamante iMac de 21,5 pulgadas (morid un poco: 4GB de RAM, 1 tera de disco duro), cortesía del Dr. Mira & familia de ambos.
¡Tengo un Mac! Oeeeeee. La primera foto:
De momento he sincronizado el iPod e instalado TweetDeck y WriteRoom, pero el resto parece que está ya ahí.
Voy a tener que suscribirme a todos esos blogs que llevo años evitando, a ver qué hay. Os mantendré informados de lo que vaya descubriendo. Y si hay miembros de la hermandad de Mac entre el público, estaré encantada de que me recomendéis cosas.
¿Qué es lo supuestamente mejor? Que es tecnología creada por mentes creativas para mentes creativas. Espero descubrir en los próximos meses qué hay de verdad en ello. El año que llevo con el iPod (I) y el iPod Touch (II) me ha hecho comprender que hay muchas cosas más allá de la velocidad de procesamiento, la capacidad de almacenaje y el tamaño (o falta del mismo) del aparato en sí.
Es curioso coger toda la tecnología del mundo y poner una pantalla como la del WordPerfect 5.1. Pero, fíjate, funciona. En dos minutos, casi 500 palabras.
Os adelanto que este ordenador no lo voy a utilizar para traducir, probablemente. Aunque no lo descarto. Bueno, voy a ver mis fotos con otros ojos… (por cierto, gracias a Mrs y Mr Carbonara por la cuenta pro de Flickr, ahora empezaré a subir algunas cositas).
Seguiré informando.
Hace unos días estuve en Cuenca y, preguntando por un restaurante a la chica de la caseta de turismo, me dijo textualmente: “Si yo me estuviera muriendo nunca vendría a Cuenca”. Me resultó sorprendente que soltara esa frase sin venir a cuento… (…) Arturo Kortázar, Bilbao. (…) A mí me hizo pensar mucho lo que
He fundado una SL con mi nueva socia Maria José Torrente, el martes inauguramos nuestras flamantes oficinas en el centro, tengo varias entradas a medio escribir, un viaje transoceánico por contar, un embarazo a ocho semanas de terminar, y al final lo que me empuja a publicar algo es este notición: El matemático Pablo Mira gana
Entre hoy y mañana muchos padres descubrirán las cuatro maldiciones que puede tener un juguete, a saber: voluminoso, ruidoso, pringoso y múltiples piezas. Es algo que abuelos, tíos y demás familia negarán conocer. Si tienes niños a tu cargo y alguna vez has maldecido un juguete, probablemente sea por una de las siguientes razones: Voluminoso.
Comentarios