A menudo me preguntan ¿en Matiz traducís a todos los idiomas? Las primeras quince, veinte o quizá cincuenta veces todavía me preguntaba, muy en serio, cuántos idiomas pensaría esa persona que realmente hay en el mundo.
Según esta página de la Unesco,
Más de la mitad de los 7.000 idiomas que se hablan en el mundo están en peligro de desaparecer. Sin embargo, son una parte esencial de la identidad de los pueblos.
(La traducción y el resaltado son míos. El selector de idioma hecho con Javascript de la página de la Unesco parece que no funciona [!]).
Digámoslo de nuevo: 7.000 idiomas. Siete mil idiomas. Hablados por seis mil millones de personas.
Pensémoslo un poco: para que se pudiera traducir directamente de todos los idiomas a todos los idiomas, necesitaríamos al menos 6.999 personas por idioma. Por siete mil idiomas, unos cincuenta millones de personas. Esto es, para que pudiéramos ofrecer traducciones de todos los idiomas a todos los idiomas, necesitaríamos disponer de los servicios de 50 millones de traductores diferentes, más que personas hay en España.
Aunque sólo ofreciéramos traducciones del español a todos los idiomas y de todos los idiomas al español, ya necesitaríamos 13.998 traductores. Sería un pequeño pueblo de profesionales, eso sí, muy interesante de visitar.
Los que tengáis empresas ya estaréis haciendo las cuentas por puesto de trabajo: los metros cuadrados de oficina (mantenimiento, limpieza, electricidad), los puestos informáticos (ordenadores, redes, software, ¡conexión a internet!), los conflictos por días laborables (fines de semana y nocheviejas distintas según cultura), y que no se nos olvide, el hecho de que cada uno sólo puede traducir dos mil palabras al día. Todavía no he mencionado la palabra sueldo. Ni control de calidad. ¿El traductor de swahili-japonés está traduciendo bien esta memoria de calidades o es su lista de la compra? Nunca lo sabremos. Habría que contratar más gente. Por cierto, necesitaremos un intérprete para entendernos con ellos y que firmen el contrato.
Creo que lo que quería decir ha quedado claro ya. Os dejo con unos datos para que, si queréis, sigáis fantaseando, poniendo y quitando hipótesis para organizar la torre de Babel y que los ladrillos sean todos del ancho y material que realmente haga falta:
El próximo día hablamos de cómo se consigue, en realidad, traducir.
Me he propuesto no publicar cosas feas, pero necesito compartir mi dolor. Todos los días tengo que pasar por este horror camino del trabajo: es la versión en tienda de un hoygan. Si quieres que tu tienda, web, o blog grite «barato» a los cuatro vientos, aquí tienes la receta completa, en cinco pasos: Sáltate
Me entero a través de Translation Times, el reciente blog de las gemelas traductoras Jenner, que el novio de Dagy, Tom Gruber, ha programado un gadget de iGoogle para buscar en ProZ.com. Así me gustan a mí las personas queridas de los traductores: regalando cosas útiles. Por cierto, ¿alguien se ha fijado lo alto que
A lo que hay encima, que es lo más interesante: libros, libros, y más libros. Llevo un tiempo queriendo escribir sobre el caótico batiburrillo curioso conjunto libros junto a los que duermo, y a veces incluso, leo. Sin embargo, van cambiando a menudo y normalmente no me parece que sean material de blog, por decirlo
Comentarios