Mi chico me manda esta cita de un reportaje de El País Semanal sobre deportes minoritarios:
En las últimas páginas de su libro Correr o morir (Now Books), el imbatible sky runner Kilian Jornet esboza una justificación a su búsqueda quimérica, extenuante e irreversible. «Quizá corro porque necesito sentirme creador; necesito saber lo que hay dentro de mí y plasmarlo en algún lugar exterior. Podemos explorar nuestro interior y saber de lo que somos capaces, pero necesitamos exteriorizarlo y verlo separado de nuestros cuerpos para contemplarlo como espectadores, poder valorarlo y detectar sus defectos para hacerlo mejor la próxima vez. Es el placer intrínseco de crear belleza y de ver que genera una fuerza de atracción a los espectadores».
Estoy aprendiendo muchísimo con mis alumnos: estoy viendo cosas desde perspectivas que no me había planteado antes. Sobre todo, veo que lo que yo considero obvio (porque yo lo conozco, porque mis amigos lo conocen) no siempre lo es. El otro día pregunté en clase, a ver, ¿quién ha hecho algún curso de mecanografía? Y
Amazon me va a matar. En serio, bueno, o matará mi escritura porque no hago más que encargar (¡y leer!) libros. Es como ir a una librería de Londres, pero sin salir de casa y sin que te pese la bolsa. Un peligro. Un peligro muy gordo. Esto es lo que me acaba de llegar
Estoy estrenando mi flamante mini portátil. Visto que este año no voy a parar entre unos viajes y otros, me he comprado esta mañana un peceñín, como lo llama José Manuel. Es un HP Mini. La verdad es que es muy bonito, y unos mil euros más barato que el otro portátil ligero que me
Comentarios