Pues el otro día a mi socia María José Torrente, emprendedora de pro y gran amante de los tacones, se le rompió uno justo antes de una reunión importante. Como estamos en el centro, bajó a comprarse otros y apareció con esto:
@minimatiz Got my nice Moroccan leather slippers on (from my hols in March) and translating an article on healthcare! twitter.com/BeckyHendry/st…— Rebecca Hendry (@BeckyHendry) July 27, 2012
@minimatiz No slippers today. Working on a boring procurement manual, enjoying Vargas Llosa. twitter.com/rolivares_net/…— Ramón Olivares (@rolivares_net) July 27, 2012
@minimatiz barefoot so that I can dance with dragons (minus the green toe separators obviously) twitter.com/ChiaraElissa/s…— Chiara (@ChiaraElissa) July 27, 2012
Hasta que esta mañana he ido a hacer esta foto, con mis magníficos planes de lectura veraniega…
Me he abierto un minibego.tumblr.com esencialmente porque me convenció David Karp el otro día.
Nah, no es verdad.
Pero me dio un empujón (metafórico).
Es porque tengo que probarlo todo.
Llevaba mucho tiempo queriendo abrirme uno, pero no sabía qué poner en él. Hasta que empecé la serie de ¿Emprendedor o superhéroe? en Instagram, y en Instagram y Twitter el hashtag #litatyourfeet. Pero no todo el mundo está en Instagram o Twitter, así que quería reunirlos en alguna parte:
Sapir-Whorf y Granada son dos conceptos que giran en este momento por mi cabeza, a tanta velocidad como para ponerme a escribir. Mi abuela es una de las razones de que, aunque hayan girado otras cosas, no haya escrito nada este verano. Imaginad por un momento a las personas que se sientan a vuestra mesa
Seré breve, porque tengo delante a Mary Jane. Sirva para decir que Mary Jane no soy yo, ni es María, es otra persona, pero este no es su nombre real, por si lo habíais dudado. Estamos al fresco en un FresCo, y tiene el siguiente dilema: Chica de 34 años, sin ataduras familiares, con hipoteca
He obligado a Ramón a escribir un artículo. Bueno, no exactamente. Digamos que se lo buscó él solito. Leed su parte de la historia aquí: Porque Begoña me lo pidió: Tim Ferriss y por qué los geeks tienen la culpa de todo. Mi parte de la historia os la cuento a continuación. El otro día
Comentarios