¿Os acordáis de los niveles extra de los videojuegos? Un bonus level es una fase del juego que surge de manera inesperada. Es una pausa que no hace avanzar la trama; pero de repente, sin haberte movido del sitio, todo está lleno de manzanas, o de piedrecitas brillantes, o de cajitas con una cruz roja, o de lo que sea. Es un lugar pequeño. No vas muy lejos, pero todo es más fácil. No hay peligros evidentes y lo único que tienes que hacer es flotar a tu alrededor, mientras tu energía se recarga. De repente, la siguiente fase te da menos miedo.
Últimamente, cuando consigo dormir cuatro horas seguidas, tengo una sensación muy parecida.
Lo bueno de hacer fotos a las cosas es que duran para siempre. Bueno, vale, mientras dure la foto. Esta semana, capuchinos y helados de Roma. Valga este ramo de aperitivo. «El mejor momento de las cosas es cuando no han pasado / porque luego lo único que puede hacerse / es comentarlo» (dice Astrud,
Y estoy animada porque he vuelto a currar, y es que tengo una especie de… podríamos llamarlo… adicción al proyecto de Matiz. Y los muy interesantes subproyectos que están por llegar. Aún no estoy al 100%, pero ya contaré más detalles cuando acabe de sacarle rendimiento a mi flamante Dragon Naturally Speaking. Mientras, deseadme suerte:
Sapir-Whorf y Granada son dos conceptos que giran en este momento por mi cabeza, a tanta velocidad como para ponerme a escribir. Mi abuela es una de las razones de que, aunque hayan girado otras cosas, no haya escrito nada este verano. Imaginad por un momento a las personas que se sientan a vuestra mesa
Comentarios