Bancolandés: el idioma de los bancos. Caso real.

Esta mañana he ido a renegociar comisiones al banco. Es algo que hay que hacer a menudo, porque si no, se te acomodan. Hoy le tocaba el turno a las transferencias internacionales, a la sazón 7€ cada una con esta entidad en concreto. Hay otras con las que no cuesta nada, e intentaba que me dieran… esas mismas condiciones, claro, pero con sus herramientas (que son mejores) y además para transferencias internacionales masivas. Había que probar.
En el trascurso de la negociación, hablando de que lo ideal es llevarles un taco de facturas y que lo hagan todo ellos, aunque fuera cobrando, este chico (que es un encanto) ha soltado una frase en bancolandés, el idioma de los bancos. Le he tenido que parar, para recordarla bien, porque merece la pena como ejemplo didáctico:

… porque son clientes con importantes posiciones de pasivo muy arcaicas…

Para negociar con los bancos hay que entender lo que te están diciendo. Chicos, esto en realidad quiere decir:

Son señores con mucho dinero en el banco desde hace mucho tiempo.

Y hasta hoy nuestra lección de bancolandés de hoy. El fondo del mensaje ya nos lo imaginábamos.

Related Posts

26 Ene
Cinco maneras de gritar «barato» a todos los vientos
arte // 2

Me he propuesto no publicar cosas feas, pero necesito compartir mi dolor. Todos los días tengo que pasar por este horror camino del trabajo: es la versión en tienda de un hoygan. Si quieres que tu tienda, web, o blog grite «barato» a los cuatro vientos, aquí tienes la receta completa, en cinco pasos: Sáltate

11 Feb
Elige con mucho cuidado
calidad // 4

El precio de ser una oveja es el ABURRIMIENTO. El precio de ser un lobo es la SOLEDAD. Elige uno un otro con mucho cuidado. (Hugh Macleod, sale en el libro que recomendé en días anteriores, Ignore Everybody) He ahí un consejo que meditar también con cuidado: ¿hay otras opciones? (¿por favor?) Hace un tiempo

13 Jul
La decisión de Mary Jane

Seré breve, porque tengo delante a Mary Jane. Sirva para decir que Mary Jane no soy yo, ni es María, es otra persona, pero este no es su nombre real, por si lo habíais dudado. Estamos al fresco en un FresCo, y tiene el siguiente dilema: Chica de 34 años, sin ataduras familiares, con hipoteca

Comentarios

Pablo
19 enero, 2009

Yo había entendido que estos clientes tenían arcillas egipcias con jeroglíficos de monigotes arrodillados, fíjate tú…

Leave a comment

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.