El otro día en Madrid me duché, me puse un vestido bonito, y en el sofá de un amigo con una mantita me dispuse a leer The Casual Vacancy, el nuevo libro de J. K. Rowling, que había salido ese día. Las últimas sesenta páginas me las acabé anoche.
Es un libro muy bueno, con partes más graciosas y más trágicas. Aunque yo acabé llorando anoche igual que con Harry Potter and the Deathly Hallows, y conocía a estos personajes desde hacía mucho menos tiempo. Noto que está muy bien escrito en que anoche no podía pensar en esos personajes sino en esas personas.
Ahora estoy deseando que os lo leáis todos, porque si no ¿con quién lo voy a comentar? ¿De qué hablo sin hacer espoiler de nada? ¿De que va de un lugar muy parecido a donde yo crecí, pero en Inglaterra? ¿De que, imagínate un tema importante en la sociedad actual del primer mundo… pues sale?
Ayy. Así que hala, a leer. ¡Estáis tardando mucho!
Claramente, dejándolo para más tarde, cuando sea mejor momento. Una pista: nunca hay mejor momento que ahora. Y entre ahora o nunca, elige bien. A veces toca nunca, a veces toca ahora. Hemos tenido un problemilla en casa estas Navidades, y es que mi hermano pequeño ha estado a esto de suspender Lengua. Quiero muchísimo
Sigo contando el viaje a Nicaragua. Me decía a mí misma: Es la primera vez que vengo, pero no es la primera vez que estoy.
¿Por qué seguir? (O por qué parar). En los últimos años he descubierto que es la pregunta del millón. ¿Qué es lo que te lleva a hacer lo que haces? No por qué lo empezaste: por qué lo sigues haciendo. No por qué lo convertiste en una rutina: por qué no la interrumpes. ¿Por qué
Comentarios