Esta frase es simple, pero me ha costado años aprender a pronunciarla:
Necesito ayuda.
Dos palabras.
Ni siquiera conseguí publicar la entrada del blog con esas palabras. ¿Queréis ejemplos? Os cuento (de lo que se puede publicar):
No se le pueden pedir más horas al día. Las horas son las que son y punto. Priorizas qué cosas se quedarán atrás, y si son importantes se las asignas a otro (véase) y si no son tan importantes, se quedan sin hacer.
Otra palabra difícil y necesaria:
No.
Cuánto cuestan las cosas sencillas. Hasta que están hechas.
Noticias razonablemente frescas: ¡nuevo blog en el vecindario! Me acabo de enterar por este comentario de que María Barrios tiene nuevo blog. Será público puesto que lo ha dicho en un blog ¿no? Se llama ¿Cuarenta segundos? ¡Yo lo quiero ahora! Tiene buena pinta como todo lo que Frau Barrios ha escrito siempre. Disfruten ustedes.
Hoy empiezo mi primera novela. La excusa es NaNoWriMo. Me animaron Neil Gaiman (bueno, él no lo sabe), Charlaine Harris (ella tampoco: pero si ha escrito diez novelas sólo sobre Sookie Stackhouse yo puedo escribir una sobre… bueno, ya la leeréis), y Stephen King, via Yolanda González Mesa, de Tinta al Sol: A menudo los
El otro día en Madrid me duché, me puse un vestido bonito, y en el sofá de un amigo con una mantita me dispuse a leer The Casual Vacancy, el nuevo libro de J. K. Rowling, que había salido ese día. Las últimas sesenta páginas me las acabé anoche.
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